Llega el frío y nos volvemos a preocupar por la factura de la calefacción. Esperamos que lo que os hemos contado en otras ocasiones sobre cómo ahorrar en la factura de la calefacción os ayude. Esta vez nos vamos a centrar en uno de esos consejos en concreto, nos referimos al aislamiento y a la localización de los puentes térmicos. Justo hoy os explicaremos cómo reducir los puntos de rotura térmica en vuestro hogar.
¿Qué es un puente térmico?
No todo el mundo se plantea comprobar el aislamiento en sus hogares, pero es uno de los grandes enemigos del escape de energía. En algún momento, deberíamos plantearnos:
- ¿tenemos una casa bien aislada?
- ¿es capaz de mantener la temperatura deseada?
- ¿tiene escapes térmicos?
Un buen aislamiento puede asegurarnos un ahorro en la factura tanto de la calefacción como en la factura del aire acondicionado en verano. Según la Secretaría General de Energía se estima que un buen aislamiento puede reducir entre un 25% y un 50% el gasto anual.
Si buscamos en la Wikipedia la definición técnica de “puente térmico” es un poco compleja: “es una zona puntual o lineal de la envolvente de un edificio, en la que se transmite más fácilmente el calor que en las zonas aledañas debido a una variación de la resistencia térmica. Se trata de un lugar en el que se rompe la superficie aislante, ya sea por un cambio en la geometría de la envolvente o por un cambio de materiales o de resistencia térmica”.
Es decir, este texto se refiere a que la fachada y la cubierta (tejado) son las zonas por donde se pierden más temperatura, debido al cambio de la naturaleza de los materiales.
Casas mejor construidas
Sin duda, en la construcción cada vez se cuida más todo lo relacionado con el aislamiento. Las normativas como la Directiva Europea sobre el Rendimiento Energético de los Edificios obligan a bajos consumos de energía en las edificaciones que se realicen. La tendencia es reducir al mínimo las pérdidas de energía por los puentes térmicos y el objetivo es conseguir la rotura de los mismos.
Los más destacados puntos de rotura térmica en una fachada son:
- Ventanas
- Vigas
- Rejillas de ventilación
- Dinteles de acero u hormigón
Puntos de rotura térmica: ventanas
Una de las zonas más frágiles de una fachada son las ventanas. El calor se transmite mejor en algunos materiales y se desplaza más rápidamente en otros.
Por ejemplo: las pérdidas de calor en las ventanas de vidrio aislante con marco de aluminio son mayores en la zona del aluminio que en el vidrio. Por eso vemos en invierno gotas de condensación en los marcos de aluminio.
Para evitar esto, se produce en las carpinterías de aluminio la rotura del puente térmico. Si la cara interna y la externa no tienen contacto entre sí, se reducen las pérdidas de calor. Entre ambas caras se puede utilizar un trozo de plástico dentro del perfil de la ventana ya que es peor conductor que el metal.
Tanto el Protocolo de Kyoto como el Código Técnico de Edificación de España obligan a que los cerramientos de aluminio sean con rotura de puente térmico.
El Código Técnico de Edificación es el conjunto principal de normativas que regulan la construcción en España desde 2006. Este código establece los requisitos básicos de seguridad y habitabilidad de las construcciones. Desde el proyecto, pasando por la construcción y velando también por el mantenimiento y la conservación de los edificios.
Otros puntos de rotura térmica en las estructuras de los edificios
1.- Fachadas
En las fachadas de los edificios se da un punto de rotura térmica por el contacto de piezas estructurales del edificio con el exterior.
Por ejemplo, en un edificio de estructura metálica, los pilares y las vigas harán de puente térmico. La estructura metálica transmite mejor el calor produciendo una pérdida, lo que hace que aparezca un punto frío en el que se creará condensación.
Estos puntos fríos se pueden solucionar colocando aislantes y haciendo una construcción inteligente. Nos referimos a rehundir las terminaciones de los pilares o vigas en la fachada.
En la edificación de los muros debe constar una cámara de aire. Esta cámara de aire, de unos 10 cm de espesor ,evita:
- que el calor se vaya a través de los poros de los materiales
- que entre el frio de la calle al interior de la vivienda.
En las casas sin cámara de aire se soluciona poniendo dentro una doble pared con perfilería y yeso laminado. Si además se pone entre los dos paramentos algún aislante, tipo lana de roca, el resultado será más eficaz. Tanto el yeso como la lana de roca, son materiales que hacen barrera de vapor contra la humedad.
Y no nos olvidemos de:
3.- Rejillas de ventilación.
4.- Paredes sólidas de mampostería.
5.- Dinteles de acero y hormigón.
Otras consecuencias
Además de la perdida de calor y frío, las zonas que son puentes térmicos tienen más posibilidades de sufrir condensaciones interiores.
Para evitar condensaciones en los climas fríos y templados hay que:
- tener una calefacción uniforme
- una ventilación correcta
De esta manera, se evitan las diferencias de temperaturas y la elevada humedad relativa del aire.
Las construcciones antiguas con multitud de puentes térmicos y escaso aislamiento, tienen menos problemas de condensación que las casas actuales. Es curioso pero como las viviendas están selladas, se han eliminado las ventilaciones naturales por el uso del doble acristalamiento.
En resumen, es fundamental que la construcción del edificio esté bien realizada, y reduzca al máximo los puentes térmicos. Debemos tratar de construir edificios más saludables que contribuyan a la protección del ambiente, para lo que se tiene que promover el uso de materiales, diseños, prácticas de construcción y funcionamientos más ecológicos. Edificios realizados con materias primas naturales, cero contaminantes y de buena durabilidad como la madera, el papel o el corcho.
Si tú cuidas el aislamiento de tu hogar, Ferroservice el servicio técnico oficial de Ferroli en Madrid y Guadalajara, te ayuda a hacer la mejor elección para el confort de tu hogar. Contacta con nosotros sin ningún compromiso.
Comentarios recientes